En mi corta vida tuve dos amores: El primero, es el de siempre, el amor de mi vida y mi karma a la vez, quien me puede hacer completamente feliz o destruirme. Esa persona que un día apareció y desde ese día me gustó, me sorprendió, totalmente opuesto a mi. Tiene ese "no se que" que me encanta siempre. Esa persona que me marco para siempre en diferentes sentidos y siempre pero siempre voy a amar. Esa persona que me cuesta superar, que extraño, que si fuera por mi jamás me iría de su lado, con quién compartiria mi vida si pudiera. Pero no supo que hacer con tanto amor, y ahora yo no se que hacer con ese amor que me sobra y no puedo dar.
Me da nostalgia recordar ciertas cosas, es más fuerte que yo. Nunca conocí a alguien así, nunca ame ni voy a amar a nadie así pero estamos destinados a no ser. Pero por alguna razón (costumbre, amor, no se) siempre estás ahí, no muy lejos..y si te pido ayuda venís. Yo sé que puede pasar cualquier cosa pero que siempre vas a estar para mi. Es inexplicable lo que significas para mi.
Mi segundo amor fue ese mejor amigo que me salvó de la depresión del primero...ese que es como un salvadidas. Ese que me brindo la felicidad casi imposible pero que se acaba tan rápido. Antes nos llevábamos mejor, ahora cambiaste tanto que no podríamos sobrevivir, te siento demasiado lejos. Después de todo, vivimos lo que pudimos juntos aunque pensé que iba a ser muy diferente.
Ahora, sigo sola llorando por el mismo Gil que lloro siempre, si ese primero. Pasan los meses y sigo extrañandote como siempre.
Ojalá pronto conozca a alguien que me rescate de este infierno y sea feliz. Pero cuesta tanto volver a enamorarse...
Me rompieron tanto tanto...pero necesito a alguien que me ame todos los días y me abrace hasta que se me pase el frío.
Necesito saber que alguien puede ser feliz conmigo.
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La ciudad va recogiendo mis pedazos..